jueves, 26 de diciembre de 2013

El Azul del Mar inunda Mis Ojos ...





Al enterarme de la noticia del fallecimiento de Germán Coppini, no he podido evitar tener un recuerdo cariñoso a toda aquella gran movida. Nuestra admiración era tal, que en las fiestas del pueblo nos atrevimos con el play-back de "Me pica un huevo".

Aunque hace ya bastante tiempo, recuerdo perfectamente cuando mi amigo Jorge me pasaba los primeros discos del punk gamberro de Siniestro Total y su ¿Cuándo se come aquí? y el sonido de los sintetizadores y las cuidadas letras de Golpes Bajos.

German Coppini (Santander, 1961), fue miembro fundador de Siniestro Total, junto a Miguel Costas y Julián Hernández. Pioneros de la movida gallega de los ochenta. Tras esta etapa inicial, lideró Golpes Bajos, con Teo Cardalda y Pablo Novoa. 

Supieron hacer una música propia y peculiar. Gozaron del respeto y de la admiración del público y de la crítica musical. Son inolvidables cualquiera de sus canciones: Cena recalentada, Tendré que salir algún día, Escenas olvidadas, Malos tiempos para la lírica, No mires a los ojos de la gente, …  

Ante todo una persona comprometida con su tiempo.

Está claro que La Movida, a la que él definió como "una época de euforia", poco a poco va perdiendo sus estandartes. En cualquier caso, es la música con la que he crecido y forma parte de mí.

 ¡Qué actual aún! ¡Cúanta razón tenías al presagiar que no corrían buenos tiempos para la lírica, ... ni para casi nada!








jueves, 31 de octubre de 2013

El Lado Salvaje de la Vida





Lou Reed perteneció al elenco de los maestros. Uno de los grandes poetas de la música moderna. Nacido en 1942 en el barrio neoyorkino de Brooklyn. Su carácter introvertido pronto le hizo refugiarse en la literatura, de la que era un apasionado, y la música.

Miembro fundador, junto a John Cale, de la mítica banda The Velvet Underground. Aunque no tuvieron mucha repercusión, las generaciones posteriores y la crítica le dieron el reconocimiento del que no gozaron en su momento. Hoy por hoy, hablar de la Velvet es hablar de una de las bandas más transgresoras e influyentes de la historia de la música contemporánea.

Apadrinado por artistas como Andy Warhol y admirado por músicos como David Bowie, su carrera continuó en solitario. Paseó por los lados más salvajes de la vida, viajó por mundos reales (Dirty Blvd, donde reflejaba la dura realidad de su Nueva York natal) e “irreales”. Como muestra su himno Heroin.

Dotado de un extraordinario genio para componer letras emocionantes y arriesgadas, de voz profunda. Considerado en los ambientes musicales un músico de culto, ajeno a las grandes listas de éxito. Sin embargo, dejó un puñado de clásicos como Walk on the wild side o Sweet Jane.

Tras su fallecimiento el pasado 27 de Octubre de 2013, después de haber sido intervenido recientemente de un trasplante de hígado, el panorama musical pierde a uno de sus músicos de cabecera.






Doo, Doo Doo, Doo Doo, Doo Doo Doo Doo, ….. 

jueves, 24 de octubre de 2013

Los Ángeles Sí Tienen Hélices





El título no viene a ser más que un pequeño homenaje a mis añorados Manolo García y Quimi Portet, El Último de la Fila. En concreto, a uno de sus muchos y magníficos temas, titulado Los ángeles no tienen hélices (… y tu risa se gasta entre mis labios encendidos de pasión…; quiero quedarme clavado a tus besos… ). En fin, … se me pone la piel de gallina solo recordándolos.

Sirva esto como excusa para contaros que, lo que vi el pasado martes, eran Ángeles de verdad, de carne y hueso. Ángeles que, dejando por un momento sus quehaceres diarios, se dedican a dar de comer a los que lo necesitan, de forma totalmente desinteresada y anónima. Me refiero a los Ángeles Malagueños de la Noche. 

Los visité con un grupo de compañeros y alumnos. Con la ayuda y el esfuerzo de todos los miembros de nuestro colegio, realizamos una compra de alimentos y los jóvenes alumnos hicieron entrega de dichos alimentos a los voluntarios, que ya a esas horas de la tarde preparaban la cena para todos los que, más tarde, se acercarían por allí. Los alumnos pudieron ver de cerca la cruda realidad que viven muchas personas y, lo importante que es, en la vida, ser solidarios. Me gustaría que esto les ayudase a reflexionar.

La asociación de los Ángeles Malagueños de la Noche está formada por un grupo de personas que, desde sus humildes casetas prefabricadas, dan de comer cada día a más de mil personas que no tienen nada que llevarse a la boca. Personas que, por diversos motivos, están atravesando malos momentos. Allí les tienden la mano y reciben algo de comida que, sin conseguir sacarlos de la cruda realidad que viven a diario, al menos, mitiga, en parte, su hambre.

Las personas que forman el colectivo de los Ángeles de la Noche, son Héroes anónimos que encuentran una recompensa personal y humana inmensa, ayudando a los demás. Me parece digno de admiración.

Son las verdaderas hélices que mueven el mundo. Por eso digo que …
Los Ángeles Tienen Hélices.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Un Mundo Al Revés






Después de haber leído en las noticias de ayer que el Programa Internacional para la Evaluación de la Competencia de los Adultos arroja unos pésimos resultados sobre nuestra capacidad en lectura comprensiva y matemáticas, me gustaría compartir un artículo publicado hace ya algunos años sobre el sistema educativo en Finlandia. A pesar de su extensión, creo que merece la pena. Sigue estando de máxima actualidad. Éste es el artículo en cuestión:

¿Por qué lo habitual en Finlandia es que un adolescente normalito termine Secundaria con notas excelentes, hablando un perfecto inglés y leyendo un libro a la semana, y aquí muy pocos consigan algo remotamente parecido? Hemos viajado al país mejor clasificado por el informe Pisa para averiguarlo.

Les presento a Saili Sipilä. Tiene 15 años. Vive con sus padres y sus dos hermanos en Espoo, una ciudad de 360.000 habitantes a las afueras de Helsinki. He volado 4.000 kilómetros para conocerlo. ¿Por qué? Por dos razones: porque soy periodista y porque tengo un hijo de la misma edad. Como periodista, quiero saber por qué Saili, un adolescente normalito de Finlandia terminará la Secundaria con excelentes notas, hablando inglés a la perfección y leyendo un libro por semana. Lo típico para un finlandés. Como padre, quiero saber si es inevitable que mi hijo, Manuel, un adolescente normalito, acabe sus estudios obligatorios aprobando por los pelos, chapurreando cuatro palabras en inglés y sin el menor interés por la lectura. Lo típico para un español. ¿Hubiera sido diferente si hubiera nacido en Finlandia? ¿Qué comparaciones entre la educación finlandesa y la española puedo hacer como periodista? ¿Qué lecciones puedo aprender como padre?

Repaso en el avión los resultados calentitos del último informe Pisa, un examen trianual que mide las capacidades de los alumnos de 15 años de 57 países en ciencias, matemáticas y lectura. Participaron 375.000 estudiantes. En España, casi 20.000 alumnos de Secundaria de 686 coles e institutos. Veamos las notas. Ciencias: Finlandia, 1ª, 563 puntos. España, 31ª, 488 puntos. Si el aprobado lo marca la media de los países de la OCDE (491 puntos), ya tenemos el primer suspenso. Matemáticas: Finlandia, 2ª, 548 puntos, a sólo uno de China Taipei. España, 31ª, 480, a cuatro de la media de los países desarrollados. Segundo insuficiente. Lectura: Finlandia, 2ª (547), por detrás de Corea del Sur. España, 35ª (461), protagoniza además el peor descenso en comprensión lectora de los países de la OCDE (485) desde el último informe. Nuestros hijos no entienden lo que leen. A la cuarta línea de cualquier texto se pierden. Muy deficiente.

Tres cates en las tres asignaturas básicas. ¿Qué hacemos? ¿Castigamos de cara a la pared a los alumnos, a los padres, a los profesores, a las autoridades, a todos? Alemania cosechó unas calabazas semejantes hace tres años y la conmoción fue tan mayúscula que los políticos se pusieron las pilas y este año sus estudiantes han aprobado con nota. Aquí, el Gobierno culpa a Franco (la precaria educación de los padres dificulta la de los hijos). Además, la fiesta va por barrios, léase por comunidades autónomas. Los riojanos pueden sacar pecho: están en el grupito de cabeza. Los andaluces deberían ir pensando en las recuperaciones: en mates les gana hasta Azerbaiyán.

Taxi hasta Espoo. Son las siete de la mañana y todavía no ha amanecido. Ni lo hará. No veré el sol durante mi estancia en Finlandia. Cielos cubiertos y noche cerrada a las tres de la tarde. En esta época del año es un país en penumbra y con sus 5,3 millones de habitantes obsesionados en encender cirios, velas y lamparitas. Limosnas de luz. Llego a casa de los Sipilä a tiempo para ser invitado al desayuno familiar. No es lo habitual, porque cada uno suele tomar un bocado por su cuenta, pero ayer (6 de diciembre) fue el Día de la Independencia y la ocasión lo merece. Me sorprende que Saili no tenga puente, pues el festivo cae en jueves. Mi hijo enlazó cuatro días de vacaciones gracias al viaducto de la Constitución. En Finlandia, si una escuela hace puente (los centros tienen autonomía para tomar estas decisiones), antes obliga a sus alumnos a salir algo más tarde cada día hasta completar las clases que se hubieran perdido.

Me descalzo, dejo los zapatos en el recibidor y converso con los Sipilä en calcetines mientras damos cuenta del café, los panecillos, el zumo de bayas y el queso lapón con mermelada. Seppo, el padre, es teólogo y se gana la vida traduciendo la Biblia. Domina una docena de idiomas, entre ellos arameo, copto y árabe clásico. Leena, la madre, es enfermera y trabaja en un hospital. Mikael, el hermano mayor, tiene 18 años y quiere estudiar Arte Dramático en la universidad, pero reconoce que las posibilidades de pasar el corte a la primera son escasas. Joel, el menor, de 12 años, es discapacitado psíquico y acude a un colegio de educación especial. La vivienda familiar es un dúplex de clase media en el centro urbano de Espoo. Lo de ‘urbano’ hay que matizarlo. Un bosque de abetos limita con la casa. «Nos mudamos aquí hace año y medio. El aire es muy puro». Espoo es la segunda ciudad de Finlandia en habitantes y la de mayor porcentaje de población universitaria en un país donde el 34 por ciento de los adultos tiene estudios superiores. «No hay apenas delincuencia. Nuestros hijos pueden pasear de noche con tranquilidad», explica el padre. Y Saili apostilla en un inglés prístino: «Finlandia es segura. Ni sunamis, ni terremotos… Me gusta vivir aquí». Yo les explico que me crié en la calle. Y eso es algo que se ha perdido en España, por los menos en las grandes ciudades. Que los niños puedan jugar al aire libre sin vigilancia.

Las ocho menos cuarto. Hora de ponerse los zapatos y salir camino de las respectivas ocupaciones. Saili coge el bus urbano (no hay autobuses escolares). El billete lo subvenciona el municipio. Por ley, ningún alumno puede vivir a más de cinco kilómetros de la escuela. Podría ir caminando, un paseo de veinte minutos, pero llovizna aguanieve y no le apetece. Saili tiene moto y bicicleta, como la mayoría de sus compis, pero sólo unos pocos desafían al frío en esta época. En el exterior, las instalaciones de la escuela Saarnilaakson dan una impresión espartana, excepto por el césped de los campos de deporte que la circundan. En la entrada no se ve a decenas de estudiantes apurando el primer pitillo de la mañana, como en los institutos españoles. Ni una colilla ni una hoja ni una pintada. «Aquí no se ensucia ni la nieve», me dice el fotógrafo.

En el interior, la limpieza resalta aún más. No hay garabatos en los pupitres ni en los aseos. Todo parece recién estrenado. Saarnilaakson es una escuela pública, como el 97 por ciento de los centros finlandeses, a diferencia de España, donde el 35 por ciento son privados. Por supuesto, es gratuita. Pero el equipamiento es el de un colegio caro en nuestro país. Las aulas disponen de un televisor con pantalla gigante de plasma, acuario de 200 litros con pececitos de colores, cocina con fregadero, medios audiovisuales, aire acondicionado, muchas plantas. Hay un ordenador por cada dos alumnos. Una docena de máquinas de coser en la clase de costura, aparatos de soldar, herramientas de carpintería, esquíes… Un gimnasio cubierto, un auditorio para las clases de teatro y un comedor con autoservicio. Todo en perfecto estado de revista. Los libros de texto son gratis (¡cómo duelen los 200 euros que tengo que desembolsar cada septiembre!), el material escolar es gratis, la comida es gratis. No parece demasiado apetitosa y los estudiantes reniegan, pero la comen. Al Ayuntamiento le cuesta 65 céntimos cada menú: un plato caliente, leche y fruta. Tanta generosidad me pone los dientes largos. Y cuando Kari Kajalainen, profesor de matemáticas, me explica que si un niño quiere estudiar, puede llegar a ser médico o juez o ingeniero, lo que se proponga, si se esfuerza, aunque su familia sea pobre, pongo cara de incredulidad. «La educación de cada finlandés le cuesta 200.000 euros al Estado, desde que entra en la guardería hasta que sale de la universidad con su título. Es el dinero mejor empleado de nuestros impuestos. La presidenta del país, Tarja Halonen, se licenció en Derecho y proviene de una humilde familia de clase obrera. «Cuando regaño a mis alumnos, les digo que están malgastando el dinero de los contribuyentes». Y otra profesora, Päivi Ketola, me cuenta que los universitarios sólo han de pagar los libros y la comida (2.50 euros en la cafetería de la facultad). El Estado los ayuda a emanciparse con subvenciones para alquilar una vivienda y una paga. Todo el sistema está montado para que los finlandeses se acostumbren a ser autónomos desde bien pequeñitos y se vayan a vivir por su cuenta a los 18 años.

Pero volvamos con Saili, que ha sonado el timbre (las notas de una balada al piano de Erik Satie) y entra en clase. Cursa 9º grado, el equivalente de 4º de la ESO en España. En la escuela de Saarnilaakson hay 400 alumnos y 40 profesores, médico, asistente social, psicólogo y hasta dentista. Y la ratio es de menos de veinte estudiantes por aula (en Finlandia, por ley, no puede haber más de 24). En la clase de mi hijo hay 34. Los compañeros de Saili son formalitos, por lo menos a primera vista. Y es que en el ideario del colegio, además de en la civilización europea y el multiculturalismo (hay clases de historia del islam o del catolicismo, aunque la población es mayoritariamente luterana), se hace un hincapié obsesivo en los buenos modales. Me asombra el respeto reverencial que le tienen a los profesores. «Sí, nos sentimos respetados y valorados por la sociedad. Ser maestro es una profesión de prestigio a la que solo aspiran los mejores. Y no basta con ser muy bueno en tu materia. Debes destacar también a la hora de saber transmitir tus conocimientos. Pero el respeto de los alumnos te lo ganas día a día. En 20 segundos lo puedes perder», explica Mati Karkkainen, docente de ciencias, en la sala de profesores, muy acogedora: un piano, una bandeja con bombones, cafeteras humeantes. Los maestros tienen un buen sueldo en comparación con los españoles, aunque algunos se quejan. Rocío no, desde luego. Esta madrileña imparte clases de español. «Cobro 1.800 euros por 15 horas semanales. El sistema no incentiva que trabajes más. Prefieren repartir el trabajo para que no haya paro. ¿Cómo? Aumentando mucho los impuestos a los que ganan más. A mí sólo me retienen el 10 por ciento. Pero a un médico que gane 5.000 euros le retienen la mitad. Además, tienes derecho a paro toda la vida. Tendría que pensármelo mucho para volver a España».

Ojo, a los niños finlandeses no les gusta el cole. Saili, que saca sobresalientes sin despeinarse, lo considera «demasiado fácil». Sus compañeros, menos brillantes, reconocen que hay que trabajar demasiado. Y Päivi Junkkari, profesora de inglés, recuerda su adolescencia como una etapa ingrata, de mucho sacrificio. «Los alumnos no vienen al colegio a pasárselo bomba. Es un trabajo. Pero saben que todos tienen las mismas oportunidades. Da igual a la escuela que vayan, en el centro de Helsinki o en un pueblo del Ártico. Todas tienen el mismo nivel». Kari Kajainen asiente. «Nos centramos en que la mayoría de los alumnos sean muy competentes. Que el nivel medio sea alto. No es una educación elitista. Preferimos que todos saquen aprobados y notables; que haya alumnos de matrícula no es una prioridad. Y, sobre todo, cuando vemos que alguno tiene problemas, le asignamos enseguida un profesor de apoyo. Tiene clases extra. Estamos muy pendientes y no dejamos que se retrase.»

Los deberes son sagrados. Y está muy mal visto que alguien copie, incluso por los mismos alumnos. Que alguien saque una chuleta es impensable. «En nuestra cultura son muy importantes dos valores: la honradez y el trabajo», comenta Päivi Junkkari. No es casualidad que Finlandia también encabece las estadísticas de transparencia y menos corrupción pública. Kari Kajainen apunta otra peculiaridad nórdica. No hay repetidores. Le digo que en España el 43 por ciento de los alumnos de Secundaria ha repetido curso alguna vez. Y que mi hijo, que siempre se salva al final, tiene incontables oportunidades para aprobar cada asignatura y, aun así, suelen quedarle un par para septiembre. Kajainen pone cara de asombro. «Aquí sólo tienes una oportunidad para aprobar un examen por la misma razón que la vida sólo se vive una vez. Y hay que aprovecharla. Si no apruebas, te quedas una hora más en clase hasta que demuestres que te lo sabes y si no, estudias en verano, pero la promoción es automática».

¿Dónde aprietan más las tuercas? «Sin duda, en la enseñanza de la lengua materna. Somos los primeros del mundo en ciencias y los segundos en matemáticas, pero el mayor reto de enseñar matemáticas es conseguir que los alumnos comprendan lo que leen, el enunciado de los problemas. Por eso lo fundamental es que lean. Y también es muy importante la enseñanza de lenguas extranjeras. El finés es una lengua minoritaria. Los alumnos también estudian sueco e inglés obligatoriamente. Y alemán, francés o italiano como optativas. Pero tienen una gran ventaja. Las películas y series de televisión extranjeras no están dobladas. Todas se pasan con subtítulos. Los niños se acostumbran desde pequeños a escuchar otros idiomas y, además, adquieren destreza lectora. Hay que leer rápido los subtítulos para no perder el hilo del programa», apunta Tuija Yrjö-Koskinen, profesora de inglés. Envidio la fluidez con la que todos hablan el idioma de Shakespeare en la clase de Sailu. E incluso chapurrean algunas palabras de español porque Los Serrano es la serie de moda.

La jornada de Saili es intensiva, de 8 de la mañana a 3 de la tarde. Pero las clases son muy breves: 45 minutos mal contados. Hay un recreo obligatorio al aire libre (los adolescentes se apretujan en la entrada porque en el patio hace frío) y una pausa de media hora para comer. Todo el horario está salpicado de breves descansos que hacen llevadero el día. Terminan frescos. No se los abruma con una montaña de materias. Las carteras son livianas. Se estimula el razonamiento crítico antes que la memorización. Hay clases distendidas, como baile de salón, teatro, arte digital, peluquería, artes marciales, hockey sobre hielo, esquí de travesía, ¡cocina! (Saili y su hermano Mikael aprendieron a cocinar en el colegio y preparan la cena en casa cuando les toca). También primeros auxilios, carpintería, soldadura o música. Los alumnos tocan el violín, la guitarra eléctrica u otros instrumentos, según sus preferencias. Y, sobre todo, se estimula el pensamiento crítico. Se invita a discutir. El sistema español margina el debate y la expresión oral. El alumno toma apuntes pasivamente, bosteza.

Saili vuelve a casa, juega un rato al hockey y hace los deberes. «Tardo de una a dos horas. Luego cuido de mi hermano Joel o cocino si no hay nadie más en casa. A las siete hemos cenado. Me conecto un rato al Messenger si mi padre no está trabajando en el ordenador. O juego a videojuegos de rol y de estrategia. Luego, me acuesto y me quedo leyendo hasta las once. Mis libros preferidos son las novelas de Julio Verne y todos los de Harry Potter. El último lo voy a leer en inglés».

Finlandia presume del mayor índice de lectura de libros y prensa de Europa. Tres veces por semana la familia toma la sauna en casa. «Lo hacemos juntos. Es el lugar donde se comentan las preocupaciones y los proyectos, donde se planean las vacaciones. Siempre buscando el sol. Hemos ido a Madeira, París y Túnez», explica Leena, su madre. Saili todavía no tiene claro qué quiere ser de mayor. «Químico, veterinario o diseñador de videojuegos.» Le pregunto si es feliz. Y me responde sin pestañear que sí.




Revista XLSEMANAL. Núm. 1052 del 23 al 29 de diciembre de 2007. Artículo: "El secreto de los finlandeses" (Carlos Manuel Sánchez)

miércoles, 2 de octubre de 2013

El Camino de la Vida





Hicimos el Camino de Santiago hace ya doce años. Siempre habíamos pensado en repetir, y el momento ha llegado este año. Aunque ya sabéis que el Camino tiene muchos caminos, nosotros decidimos hacer el epílogo desde Santiago a Finisterre. Nos atraía bastante experimentar las sensaciones que vivirían los antiguos peregrinos al llegar a ver la inmensidad del mar en el “fin del mundo”.

Como cualquier meta que te propones y consigues con esfuerzo e ilusión, alcanzar Finisterre nos llenó de alegría, de felicidad.

Han sido pocos, pero intensos días. El Camino tiene algo especial, difícil de explicar. Una mezcla de sentimientos nobles lo envuelve. Es curioso cómo, a pesar de los escasos días que convives con otros peregrinos, los lazos de amistad y empatía que se establecen son tan fuertes. Para muchos es un viaje de fe, para otros es un viaje de conocimiento interior, o un viaje por la naturaleza, los paisajes, … En cualquier caso, todos ellos son respetables.

Lo que es indudable, es la emoción y la satisfacción personal que se siente cuando uno lo termina y se encuentra con el Apóstol. La emoción, el cariño, el esfuerzo, la fe, la amistad, la paz interior… todo confluye en ti en ese momento. Es mágico. Es un torrente de emociones.

Han sido muchas horas caminando a solas, con uno mismo, o en compañía de otros peregrinos.

Tiene mucho de búsqueda, de viaje interior. En nuestro caso particular, todos los buenos deseos con los que inicias cualquier viaje, se vieron recompensados en la Misa del Peregrino a la que asistimos. Rebosábamos emoción, tranquilidad, fe y paz. Jamás lo olvidaremos.

Queda pendiente una tercera vez. ¿Para cuándo? … Dios dirá.





domingo, 1 de septiembre de 2013

Buscando el equilibrio




Los más afortunados habrán podido disfrutar de unas merecidísimas vacaciones, después de un largo y agotador año. Llega el momento de incorporarnos a nuestras respectivas tareas cotidianas. Aún sabiendo que cuesta trabajo, es momento de hacerlo con la mejor de las sonrisas. Gozamos de salud y ganas de trabajar, y … las próximas vacaciones están por llegar. En cualquier caso, cada uno sabe buscar y encontrar su propio equilibrio interior.

No hace mucho, me acerqué a la acupuntura, debido a un problema de afonía que sufrí. A pesar de mi desconocimiento, la experiencia fue muy positiva. Recuperé en un brevísimo espacio de tiempo el tono de voz adecuado, y las sensaciones placenteras de equilibrio y relajación que sentí durante las sesiones, fueron merecedoras de elogio. El trato que me dispensaron fue, en todo momento, cercano y agradable.

La acupuntura, basada en técnicas de la medicina tradicional china, sostiene que el cuerpo humano es un pequeño universo unido por canales que, mediante una estimulación física adecuada por parte del acupuntor, mejora las funciones de autorregulación del organismo y sana a los pacientes.

A todos aquellos que busquéis alivio a vuestras pequeñas molestias cotidianas, os invito a que os acerquéis a Acupuntura Costa del Sol. El trato es muy profesional y las técnicas plenamente reparadoras. Hablo con conocimiento de causa.

Un saludo a todos.

domingo, 9 de junio de 2013

El Cártama Deportivo: una pequeña - gran historia






Como todos los chavales de mi edad, después del cole andábamos como locos buscando cualquier sitio donde jugar a la pelota: La Plaza, El Pilar Arriba, Trascastillo, … daba igual. Partidillos los sábados por la mañana en los chasleces, en la pista, en la era las lobas, tercero contra cuarto, cuarto contra quinto, … pero… no teníamos entrenador.

Recuerdo la tarde en que fuimos a la casa del Chío con el Paco el Palma, el Palero, el Pepe la Trini, el Juani la Morilla, el Paco Sánchez y algunos más,… para pedirle que nos entrenase. Imaginaos la ilusión con la que compramos en Deportes Pipi la primera e histórica equipación roja con las mangas blancas y el pantalón azul, pagando, con mucho esfuerzo, una pequeña cuota cada semana. Creo, no mentir al decir que, ese fue el comienzo de la maravillosa historia que vivimos años más tarde.

Empezamos a entrenar y el equipo fue tomando forma con un grupo de chicos de diversas edades y gente del pueblo que quiso colaborar con el Chío en esa tarea, y acompañarnos, cada fin de semana, por esos campos de tierra en los que jugábamos.

Quedan en el recuerdo de todos, partidos memorables, como el triunfo frente al Málaga en la ciudad Deportiva de El Viso, la remontada en Álora en la que, aunque acabamos perdiendo, nos supo a victoria, o la consecución del Trofeo Federación. Y muchísimos más, con los que el equipo acabó siendo campeón en cada una de las categorías en las que jugó. Orgullosos estamos de que jugadores de aquel equipo formasen parte del Málaga, como el Richi, el Huertas o el Miguel los Pollos; o de la Selección Andaluza, como el Juani La Morilla.

Tampoco olvidamos las entregas de trofeos en El Callaíto, los desplazamientos fuera de casa en los coches particulares de los directivos, donde nos leían la cartilla sobre cómo portarnos los fines de semana; los desplazamientos a los partidos en la furgoneta del Rubio, en la del Diego de Paca Huertas o en la del Rabuchín, escuchando Los Calis. El regreso de los desplazamientos, cuando el Chío nos decía la puntuación que cada uno había conseguido en el partido. Aquella genial excursión a Sevilla, o la que hicimos al Tívoli, las paellas de arroz en el río que nos preparaba el Antonio el Pella, los entrenamientos en los escalones con el Pepe Rebollo o la subida a la ermita con un compañero a cuestas. Algunos partidos broncos, como en Ronda o en Peña Pavero y los primeros cigarrillos que el Pepe Rebollo controlaba las noches de los sábados previos al partido, cuando nos invitaba a tomar algo en La Moviola.

Con el paso del tiempo, los niños, estos niños que hoy están aquí, se hicieron hombres, pero aún conservan los valores del trabajo y de la amistad que el Chío, el Pepe Rebollo y la Junta Directiva supieron inculcar en todos nosotros.

Todavía hoy, cuando cruzo la carretera y bajo la cuesta que lleva al campo de fútbol, se me pone un nudo en la garganta. Y es que han sido muchos los momentos entrañables que ya forman parte de nuestra pequeña-gran historia. Nos acordamos siempre del Rafael la Vana y del Antonio el Pella que hoy no pueden compartir este momento con nosotros, pero desde el cielo, seguro que lo estarán disfrutando. Nuestro recuerdo eterno, también, para ellos.

Estas palabras solo pretenden ser un reconocimiento de los que, hace mucho, fueron vuestros niños y hoy, son hombres agradecidos a todos vosotros. Gracias Chío, gracias Pepe, gracias a todos. Con nuestro afecto y cariño: Los niños del Chío.

Dedicado, también, a todos los jugadores que en algún momento han formado parte de este equipo y de este club.

martes, 23 de abril de 2013

La Ciudad Escondida




Su historia es tan variada como la de sus pobladores. Su situación, como paso natural desde la costa hacia el interior, hizo de Cártama un lugar preferente de asentamiento humano.

La zona fue ocupada sucesivamente por íberos, tartessos y fenicios, romanos, visigodos, bizantinos y árabes, hasta su conquista por los cristianos.

Cuando los fenicios llegaron a la actual zona de Cártama, vieron que la falda del monte estaba habitada por aborígenes, con los que rápidamente establecieron relaciones comerciales. Poco a poco, se fusionaron con ellos dando nombre al primitivo asentamiento de CARTHA, que quiere decir, ciudad oculta o escondida. Más adelante, los romanos la llamarían CARTHIMA, convirtiéndola en municipio en el año 195 a. C. y dotándola de poderosas defensas.

Tras el dominio romano, Cártama pasó sucesivamente a poder de godos y musulmanes. Los árabes construyeron el Castillo y las Murallas, que convirtieron al pueblo en uno de los principales baluartes de la defensa de Málaga.

 Fue durante la época medieval cuando la población tomó su nombre actual, Cártama, de origen musulmán. En 1485 Cártama fue conquistada por las tropas del Rey Fernando el Católico, acontecimiento que fue inmortalizado por los tallistas en los bajorrelieves del Coro de la Catedral de Toledo.

 En estos días se celebra en la localidad la fiesta grande en honor a su patrona, la Virgen de Los Remedios.

La historia cuenta que la imagen de la virgen fue hallada por un pastor que vigilaba sus ovejas en los peñascos que se alzan ante el pueblo. Este halló un día una pequeña figura de delicada talla. El pastor se puso muy contento con el hallazgo y creyó que era una preciosa muñeca.

Pensó ofrecérsela a su hija como regalo, por lo que le buscó un hueco en su zurrón. Al llegar a su casa no encontró la muñeca. Al día siguiente, el pastor volvió al mismo lugar y allí estaba nuevamente. La puso otra vez en el zurrón. Cuál no sería su asombro al comprobar aquella tarde en su hogar que, de nuevo, faltaba la imagen que con tanto cuidado había guardado.

Por tres veces se había repetido el increíble fenómeno y cuentan que el pastor, hombre de fe sencilla, pensó que era una llamada del cielo, y consultó con el cura y otras personas del municipio el posible milagro sucedido, para que ellos resolvieran el asunto.

 El hallazgo resultó ser una pequeña imagen de la Virgen María, y todos estuvieron de acuerdo en que era una forma clara de que la Divina Señora había querido manifestar su voluntad de que en aquel monte le fuera ofrecido culto y rendida devoción, levantándose en su honor una ermita y dándole el patronato señorío del pueblo y su comarca.

 Cuenta la tradición que la primera advocación de aquella imagen fue del Monte. La actual advocación de los Remedios se remonta al último tercio del siglo XVI, en tiempo de una epidemia de peste devastadora.

El 23 de abril de 1579, se decidió por los habitantes del lugar procesionar la imagen de la Patrona, cesando aquella mortandad de entonces. Agradecido el pueblo por el favor y remedio de aquel mal, acordó el Consejo Municipal, ante el notario eclesiástico y el obispo diocesano, “celebrar a partir de entonces y por siempre jamás, la función de acción de gracias cada 23 de abril.”

Como cada año, desde entonces, el 23 de abril es un día especial en Cártama. Sus fachadas recién encaladas tienen una luz y un color distintos. Sus calles huelen a cera derretida de las velas, como lágrimas de agradecimiento a su patrona. El romero de su sierra sirve de alfombra a ese paseo, emocionado y sincero, que los cartameños le brindan. La Plaza, La Calle Arriba, El Bajondillo, La Calle Enmedio, La Punta,… en cada esquina, los pétalos de rosas y claveles perfuman la noche de abril. Tras las bandas de música que la acompañan, ya suenan los pasodobles en las casetas. Todo se engalana para vivir unos días entrañables.

Desde esta cercana distancia, siempre agradecido y orgulloso de ser uno de los tuyos.



A ti, Madre de los Remedios ...

(Fuente: Breves apuntes sobre la historia de Cártama)

jueves, 28 de febrero de 2013

Don Carnal






Sin profundizar en comentarios sobre la etimología del término carnaval o los orígenes del mismo, ya sabemos que, justo antes de Doña Cuaresma, llega don Carnal, periodo en el que la parodia se traslada a las calles y las máscaras llenan todos los rincones. Alegoría del Libro de Buen Amor del afamado Arcipreste de Hita.

Este año hemos visitado el Carnaval de Cádiz, y bien que hemos vivido ese buen amor del que hablaba el arcipreste. El amor entendido como momento para compartir amabilidad y simpatía con los que te rodean.

La ciudad es todo un escenario en el que gaditanos y visitantes son sus protagonistas. Es una simbiosis perfecta entre el ingenio, el arte y la gracia. Se ven disfraces de todo tipo, y la música invade las calles. El barrio de la Viña, el Mentidero, la Plaza de San Francisco, en cualquier esquina se respira arte. Agrupaciones ilegales que se apostan por las esquinas y callejuelas de Cádiz, todas ellas divertidísimas y sin alardes técnicos, pero con una simpatía digna de las más altas escuelas. Si el hambre aparece, unos buenos bocatas o un cartucho de pescaíto frito.

La noche fue intensa y se hizo corta.

Las primeras luces del día asoman por la Caleta y en el camino de regreso, vamos cansados pero felices de haber pasado una noche sobre un escenario sin igual. Don Carnal se marcha hasta el próximo año. Pronto, el olor a incienso llenará las calles y la ciudad volverá a recuperar su ritmo habitual.

Fueron solo unas horas, pero lo pasamos… ¡genial!

sábado, 12 de enero de 2013

Recuperar las emociones



Siendo realista, no corren buenos tiempos. La situación actual que vivimos es complicada. No queremos caer en el pesimismo, así que tengamos un hálito de esperanza.

Cuando todo va mal, es momento de buscar la felicidad en las personas a las que queremos, que nos acompañan en el día a día. Dar un paso atrás para ver mejor y vivir los momentos con la intensidad que merecen. Vivir el presente. Cada momento es único e irrepetible.

A lo largo de la vida vivimos situaciones positivas y negativas. Intentemos aprender de ellas y crecer con ellas. Posiblemente muchas de estas situaciones nos ayuden a crecer como personas. Trabajemos intentando hacer que nuestra realidad más cercana cambie a mejor. Demos importancia a las cosas que realmente la tienen.

Tenemos a nuestro alcance los medios necesarios para ello, nos puede ayudar el hecho de recuperar las emociones: vivamos con pasión, amemos, cultivemos el corazón, piensa que es otro día para vivir, intenta ser el faro que guía, la vida es un viaje a la felicidad, encuentra tu lugar en el mundo, mírate por dentro, sé coherente, ten compromiso, comprométete con tu formación personal, ayuda a otros a crecer, sé tú el primero en quitar las piedras del camino, confía en las personas y, sobre todo, … contagia esperanza.




Recuerda: "Todo se transforma".