miércoles, 29 de abril de 2020

Nunca caminarás solo



Hace unos años visitamos Liverpool y me quedé con las ganas de haber vivido un You´ll never walk alone en Anfield. No pudo ser por necesidades del guión. Disfrutamos de la ciudad a lo grande: nuestro tour en inglés, un frío terrible, una llovizna auténticamente british, nuestras pintas de cerveza, nuestro paseo por el universo Beatles y una compañía inmejorable. 

Ayer, al enterarme del fallecimiento de Michael Robinson, me vinieron a la mente todos esos buenos recuerdos. Michael amaba el rojo pasión de la camiseta del Liverpool, no en vano fue campeón de Europa con el club en 1983. También consiguió el título de liga y el de la copa de la liga. 

Nacido en Leicester en 1958, tras su etapa como futbolista en las islas, recaló en el Osasuna. Fue ahí donde se produjo esa chispa que provocó su amor por España. Amor que nunca escondió y que España supo devolverle con creces. Adoraba nuestra cultura, nuestra gente. Hijo adoptivo de la ciudad de Cádiz, de la que quedó prendado de ese arte andaluz que no se pué aguantá. 

Durante muchísimos años entró en nuestras vidas como comentarista de grandes partidos de fútbol y programas deportivos. Un acento especial y un finísimo sentido del humor. Su programa Informe Robinson lo he usado infinidad de veces en las clases con mis chicos para contar historias sobre el esfuerzo, la pasión, la ilusión, la amistad, ... la vida. Nos ha hecho emocionarnos muchísimas veces, como ese You´ll never walk alone que siempre te acompañará para que nunca camines solo. 

Gracias, Michael.