La joven mijeña de 17 años, poseedora de dos récords de Andalucía sénior, se estrenará la próxima semana en el Europeo absoluto de piscina corta.
Si existiera un 'ranking' de jóvenes deportistas a seguir en la provincia ella estaría sin duda en la zona noble de la tabla.
Hasta antes de la crisis sanitaria, el nombre de Laura Rodríguez todavía era desconocido para el gran público. Aún era una prometedora nadadora infantil que peleaba en silencio por buscar su hueco en la élite. Y lo lograba, en su categoría. Hace años que se mide contra las mayores potencias nacionales y no sólo eso, es una de las mayores 'recordwoman' de Andalucía: cuenta con once récords autonómicos vigentes en categorías inferiores en piscina corta y ocho más en piscina de 50 metros. Pero su verdadero despegue comenzó cuando la Covid se fue disipando. En una campaña convulsa logró los mejores resultados de su precoz carrera, aun habiendo pasado un año en blanco y habiéndose enfrentado a un obligatorio salto de categoría. De hecho, a sus 17 años, también posee dos récords de Andalucía absolutos en 200 braza: 2.28.73 en piscina de 25 metros y 2.27.54 en 50.
Su evolución ha sido tal que, siendo júnior comenzó a plantar cara a las grandes del panorama español en categoría absoluta, lo que la llevó a recibir la llamada de la selección nacional para concentraciones y mítines internacionales, pero hasta hace unos días aún no sabía lo que era aparecer en la convocatoria para una gran cita sénior de piscina. Rodríguez, con sólo 17 años, será la única malagueña que acuda con la selección española al Europeo absoluto de piscina corta en Kazán (Rusia), del 2 al 7 de noviembre, y dada su edad, será además una de las benjaminas del combinado. «No puedo estar más contenta; es lo que quería», cuenta, todavía emocionada.
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En realidad no le pilla por sorpresa esa convocatoria, porque Rodríguez revalidó su ansiada mínima continental en la que define como la mejor competición que ha realizado hasta le fecha, y no es para menos. En el último Campeonato de España fue bronce absoluto en 50 braza, oro júnior y plata absoluta tanto en el 100 como en el 200 (también en braza) y bronce júnior en 200 estilos. «Fue el mejor campeonato de mi vida y, además, nadé disfrutando. No se puede pedir más», recuerda.
Por desgracia, no todo resultó ser un camino de rosas. La joven mijeña mantiene una espinita clavada por el agridulce recuerdo de su debut en una gran cita internacional júnior, el Europeo de Roma del pasado julio. Por cualidades y estado físico Rodríguez era consciente de que estaba capacitada para pelear por los puestos de honor, incluso por las medallas. Sin embargo, se encadenaron varios contratiempos: «Me fue regular. Me puse malísima con algo que cenamos y me tuvieron que dar de baja. Nadé el 50 el primer día, por probar, y en el 200 me descalificaron habiéndome metido en semifinales, porque según la cámara en el viraje no toqué con las dos manos a la vez, pero bueno...», discute. «Y esa noche algo de la cena me sentó mal –continúa– y ya no podía competir en esas condiciones. Mejoré el último día e hice el relevo con España y quedamos quintas. Eso muy bien».
Ahora, cara a Kazán, aunque aún no manifieste nerviosismo y opte por no imponerse metas exigentes consigo misma, lo cierto es que anhela poder hacer una gran actuación, a sabiendas de que será un gran escaparate. Además, se trata de una buena oportunidad, porque algunos de los grandes nombres causarán baja en la cita rusa al preparar el Mundial de corta de Abu Dabi, en diciembre.
Una buena ocasión para empezar a probarse en su primer año oficial como absoluta. «Todavía no estoy nerviosa, pero a ver los días previos cómo estoy. Lo afronto con mucha ilusión y como una gran oportunidad antes del Campeonato de España, pensaba que no llegaría a este Europeo. Creía que sólo irían las grandes, pero no sabía que había mínimas para los jóvenes y por ahí lo podía conseguir. Así pude llegar. Este es un gran reto para mi», valora la joven mijeña, que disputará los 50, 100 y 200 braza.
Xavi Casademont: «Ahora hay que ver quién evoluciona, cuándo hay que afrontar el reto»
Aunque defiende el nombre del Kronos Mijas, Rodríguez también se entrena a las órdenes del reconocido Xavi Casademont en el Centro de Tecnificación de Inacua.
Él, sin duda, es el más cualificado para valorar su progresión: «Está teniendo una evolución muy buena. En el Europeo júnior tuvo problemas. Hubo que quitarla de una prueba, también la descalificaron de otra… Pero era candidata clara a pelear por las medallas en la final», afirma, contundente. Incluso, el técnico asegura que, de seguir por este camino, está llamada a ser una de las grandes bazas nacionales del futuro: «En España, es el relevo claro a Jessica Vall (olímpica) y Marina García. Son palabras mayores, pero tanto ella como Inés Sancho y Emma Carrasco, son su relevo. Ahora es cuando hay que ver quién evoluciona favorablemente y quién no. Es una edad peligrosa, pero es ahora cuando hay que afrontar el reto».
Al mismo tiempo, Casademont es consciente de lo verdaderamente difícil del proceso que atraviesan muchas grandes promesas en ese momento clave en el que pasan de las categorías inferiores a la absoluta. Crece la exigencia y la competitividad, pero el catalán ve grandes posibilidades en la mijeña: «Está físicamente preparada: Es más una dificultad mental. Tiene que dar un salto de calidad grande y pasar de ser de los buenos en su categoría a las pequeñas de la categoría siguiente. Pero está preparada para que pueda ir luchando por las medallas en las finales de los Campeonatos de España».
(Artículo publicado en el Diario Sur el día 28 de octubre de 2021)
